1849Observatorio Astronómico Nacional

Pese al temprano interés en la astronomía, no fue hasta 1849 que esta práctica surgió como ciencia en Chile. La expedición realizada por el teniente James M. Gilliss (1811-1865)[1] destinada a determinar el paralaje solar durante los tránsitos de Venus, “estableció i proporcionó los medios de construir un observatorio nacional permanente”[2] y realizó numerosas investigaciones en nuestro país.

La expedición emplazó el observatorio en las periferias de Santiago, en el Cerro Santa Lucía, aprovechando los fuertes españoles que ahí se encontraban y las estructuras prefabricadas traídas de Estados Unidos. El observatorio comenzó a funcionar en diciembre de 1949, con fondos del gobierno de Estados Unidos[3].

En 1852, una vez terminadas las investigaciones, el gobierno de Manuel Montt decretó la compra de los instrumentos astronómicos usados por la expedición. Utilizando dineros del Tesoro Nacional invirtió 7.823 pesos en instrumentos, edificios y libros del observatorio, destacándose un refractor ecuatorial de 16,5 cm. Tras estas gestiones, el Observatorio Astronómico Nacional (OAN), pasó a manos del gobierno chileno quedando bajo la administración del Ministerio de Instrucción Pública[4]. Su primer director, Carlos Moesta, trasladó en 1856 el observatorio hacia la Quinta Normal de Agricultura, buscando alejarse del centro de la ciudad. Tras Moesta, una serie de directores contribuyeron al impulso de las actividades de observación a través de nuevos instrumentos, logrando importantes resultados, que permitieron la asistencia de especialistas al Congreso Internacional de Astrofísica de París y su participación en el proyecto de la Carte du Ciel[5]. Dentro de las diversas actividades del OAN destacaron las observaciones de cometas, planetas y estrellas, creando un catálogo de estas últimas en 1931[6], además de prácticas constantes de observaciones meteorológicas publicadas en los “Anales de la Universidad de Chile”. En 1927, por decreto gubernamental, la Universidad de Chile se hizo cargo del OAN, dependiendo directamente de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, que se encarga hasta nuestros días del desarrollo de la astronomía en nuestro país tanto a nivel académico como comunitario.

Las expediciones tuvieron un importante impacto en la sociedad. Ya hacia 1850 el gobierno chileno se encargó de que la expedición de Gilliss admitiera a jóvenes para que estos adquirieran “nociones de astronomía, e instruirse prácticamente en el uso de los instrumentos que de está provisto”[7], con el fin de poder crear un observatorio permanente en el país. Esto supuso un gran paso para el desarrollo de las ciencias en nuestro país, y la necesidad de estudiosos que se especificaran en ciertos campos de estudios para el porvenir del país. Aunque la Universidad de Chile desde que se hizo cargo del OAN impartió clases de astronomía, no fue hasta 1960 con la llegada de nuevos observatorios astronómicos en el país, que se creó la Licenciatura en Ciencias mención en Astronomía, mientras que la Universidad Católica implantó la Licenciatura en Astronomía en 1998.

Actualmente el Observatorio Astronómico Nacional se encuentra emplazado en el Cerro Calán, comuna de Las Condes en Santiago, y en él se pueden hacer visitas guiadas para la difusión científica.


[1] Astrónomo, superintendente del Observatorio de Washington y difusor de la enseñanza científica. Organizador del primer Observatorio activo de los Estados Unidos en 1838 y con una vasta cantidad de investigaciones publicadas en Europa.

[2] “Biografía, artículo del Evening Transcript acerca del capitan de la marina norte-americana James M. Gillis, superintendente del Observatorio Astronómico de Washington i fundador del de Chile”, Revista Anales de la Universidad de Chile, tomo 26: (1865).

[3] Edgardo R. Minniti y Santiago Paolantonio, “Observaciones en la latitud sur de la América remota”, Saber y tiempo, nº 59: (2005): 114.

[4] “Leyes i decretos del supremo Gobierno”, Anales de la Universidad de Chile, serie 1: (1852): 419.

[5] Programa internacional de fotografía astronómica.

[6] Carlos Moesta, “Determinación de la latitud jeográfica del Círculo Meridiano del Observatorio Nacional de Santiago, i observaciones elativas a la determinación de 22 estrellas fundamentales”, Anales de la Universidad de Chile, serie 1: (1854): 398-410 y Observatorio de Santiago de Chile,”Catálogo de 3555 estrellas de la zona -22º a -23º observadas en el Observatorio de Santiago”, Anales de la Universidad de Chile, serie 3: nº 1 (1931): 207-224.

[7] “Leyes i decretos del supremo gobierno”, Anales de la Universidad de Chile, (1850),  222.